sábado, 21 de noviembre de 2009

¿SABÍAS QUE?

¿En los parques chinos la gente se reúne para hacer Taichi? Practican dos tipos de Taichi: uno dinámico, similar a un aerobic pero con movimientos de menor impacto y acompañados de música bacaladera; y un Taichi para personas mayores, mucho mas suave. Se juntan decenas de personas que sin estar colocadas de forma ordenada, todos van al mismo ritmo y hacen los mismos ejercicios.

¿A los chinos les encanta el Karaoke? En todas las ciudades hay muchísimos locales donde la gente joven va a cantar Karaoke. En algunos, el nivel roza la profesionalidad y es que hay una banda en directo que acompaña al cantante karaokero. Incluso en los autobuses te ponen karaoke para que vayas cantando durante el trayecto. El colmo fue en un parque donde había una pareja que se había traído de casa: un portátil donde poner y proyectar la letra de la música, un amplificador y unos altavoces y ¡se habian puesto a cantar! En otra ocasión fuímos al cine(vimos 2012, por cierto); pues bien en la tercera planta del edificio estaba el cine, pero las dos plantas inferiores estaban llenas de habitaciones para karaoke repletas de chinos medio borrachos cantando.

¿Les encantan las cometas? En los parques puedes ver a muchas personas: la mayoría hombres mayores que hacen volar sus cometas con muy buena mano. Puedes ver las cometas ondear en lo alto. Todo un espectáculo.

¿Beben té y agua caliente todo el día? ¿Recordáis la marca Tupperware de recipientes de plástico para conservar alimentos? Pues bien, los chinos llevan un recipiente de estos de forma cilíndrica y dentro de él llevan agua caliente. En ella ponen unas hojas frescas de té. El té se queda en la superfície y poco a poco va cayendo al fondo, cosa que indica que el té está listo. Llevan este recipiente en la mano y en muchos lugares como estaciones de tren, estaciones de autobuses, vagones de tren, aeropuerto,... hay fuentes de agua caliente para poder rellenarlos. Usan esa misma agua para añadirla a unos fideos precocinados que venden. Les añades agua y unas salsas que acompanan los fideos ¡y listos! Seria el equivalente a nuestras "Sopinstant".
¿Venden muchos productos envasados al vacío? Tienen una gran variedad de comida envasada al vacío. Esta comida es la que suelen añadir a los botes de fideos precocinados. Hemos visto pescados enteros, trozos de pescado desmenuzado, tiras de carne seca, patas de pollo, riñones, cabezas de pollo, huevos de codorniz, huevos duros, salchichas y algunas otras cosas que no hemos sido capaces de identificar.

¿Fuman como locos? La campaña anti-tabaco todavía no ha llegado a China. Muchísimos hombres fuman y lo hacen en todas partes: restaurantes, vagones de tren, autobuses, mini buses... No importa si hay una señal que lo prohiba. Todavía no están mentalizados de lo perjudicial que es y no están concienciados de lo molesto que puede ser para otras personas. De todos modos, si les dices que apaguen el cigarro, lo hacen enseguida y muy amablemente; aunque no llegan a entender el motivo de tu petición. Por lo visto al gobierno le interesa que el pueblo fume ya que es una gran fuente de ingresos. Recordad que la población china es de 1 billón.

¿Les encantan los brillos y las lentejuelas? Las mujeres llevan cosas brillantes en todos sitios: he visto botas de piel con apliques de lentejuelas, guantes con brillantes, camisetas con unas luces que van a pilas, cintas de pelo chispeantes, manicuras cintilleantes,... todo un mundo delumbrante.

¿A la hora de pagar en algunos autobuses hay una caja donde tú depositas el dinero del billete? Está situada justo al lado del conductor, pero es una caja sin mas. En otros autobuses todavía hay revisores que pasan a cobrar persona por persona. No hay un botón para pedir la parada, sino que el conductor para en todas las paradas que ve gente.
En Beijing es distinto, ya que la puerta de subida en los buses es la puerta central, mientras que por la puerta trasera y delantera es por donde bajas. En este caso hay un revisor en la puerta central.
Como son tanta población, en las paradas de buses donde paran varios numeros, hay unos carriles marcados en el suelo con el numero de bus correspondiente y la gente hace cola en estos carriles para no mezclarse con personas que quieran coger otro autobus. La mar de ordenados.

¿Cuando un devoto budista entra en un templo hace una reverencia a su dios? Consiste en juntar las palmas de las manos y colocarlas primero sobre la coronilla, después en el entrecejo y finalmente a la altura del corazón. Seguidamente se arrodillan en los cojines que siempre hay frente un Buda y tocan con la frente y las palmas de las manos en el suelo. Esto se repite 3 veces. La mayoría de las veces hacen ofrendas de incienso, dinero, frutas o dulces a su dios. Como mas bueno sea lo que le ofrezcas, mucho mejor.

¿Lo comen todo con palillos? La comida ya está cortada en trozitos pequeños para facilitar cogerla con los palillos, pero hay cosas como los fideos que son difíciles de coger. Por eso, saber que un chino está comiendo, es fácil porque hacen un ruído terrible. Comen con la boca abierta y tienen que "sorber" muchas veces para poder llevarse toda la comida a la boca.

¿La camas son duras como piedras? En general no hay somiers de muelles como los nuestros, sino tablas de madera enteras, sobre las que ponen el colchón. Si el colchón es ancho amortigua la dureza, pero en la mayoría de ocasiones, la cama es dura como una tabla y te levantas con espalda de faquir,... Claro que no hemos probado los hoteles de lujo. En ese caso quizá la cama sea mullidita, pero en los hoteles en que nosotros nos movemos la cosa está muy dura.

¿Usan unas calculadoras que cada vez que apretas el número en cuestión, hay una voz de dibujos animados que te dice el número que has marcado? Son entre divertidas y frikis.

martes, 17 de noviembre de 2009

LESHAN Y EMEI SHAN


Shan es una palabra china que significa montaña, y es que llevamos varios dias visitando varias montañas donde se asientas algunos puntos de interés budistas muy importantes.

Hace dos días pudimos visitar en Leshan el Gran Buda de tan solo 71 metros de altura esculpido en el acantilado donde confluyen los rios Minjiang, Dadu and Qingyi. Nosotros lo divisamos desde la isla situada justo delante. Aunque estaba un poco lejos, desde este punto se puede observar la mejor perspectiva de este colosal. Y es que el Buda fue promovido por el monje Haithong en el 713 para apaciguar los demonios que habitaban la confluencia de los rios y provocaban muchas muertes de barqueros. El proyecto funcionó y es que los escombros que sobraron de la construcción fueron echados al rio, con lo que la turbulencia de las aguas se redujo, evitando más muertes. Como podeis observar en las fotos, este gigante impresiona a todos los monstruos de la zona.

Luego decidimos venir a Emei Shan, una de las cuatro montañas sagradas Budistas más importantes de la China, junto con Wutai Shan.

Estas montañas fueron uno de los sitios de paso y retiro de Puxian, un bodhisattva que venía a lomos de su elefante para extender el budismo desde la India. A partir de entonces se construyeron muchos monasterios en este lugar, gran parte de los cuales fueron destruidos por incendios o por la Revolución Cultural China. Hoy día han sido rehabilitados gran parte de ellos, aunque por el turismo que para la religión.

En la cima de la montaña a 3077m de altitud se halla el Monasterio de la Cumbre Dorada desde donde se pueden ver unas magnificas vistas del valle que se extiende a sus pies. Además, a veces se crea un fenómeno muy especial. A los pies de monasterio se crea una cortina de niebla que no deja ver el valle, así cuando sale el sol por encima se crea como una aureola parecida a la que se pinta a Buda, Maria o Jesús. Al parecer no es muy fácil de ver y la mayor parte del año esta tapado por las nubes, y más ahora que es otoño. No obstante, he encontrado algunas fotos en internet que demuestras que realmente se crea este fenómeno aunque yo no tuve la suerte de verlo.

Para subir a esta montaña hay una peregrinación de un par de días, y a mi me apetecía mucho subir, pero a Noemí le apetecía pasar el frio polar que hace en esta fechas del año a 3000 metros de altitud. Así que hemos decidido separarnos por unos dias para que cada uno hiciera lo que le apeteciera.

Así que hoy he subido 25 Km de escaleras interminables con un un desnivel de 2500, y es el camino empezaba en los 700m y he terminado en la cima del monte. En la guía ponía que era difícil empezar la peregrinación en el Templo de la Larga Vida y terminar en el Templo de la Cumbre Dorada, y la verdad es que así ha sido. Sobre todo las últimas 2 horas que se han echo interminables, tanto por el cansancio acumulado como por el frio invernal que hacía. En total he caminado unas 8 horas, con muy pocas paradas para visitar los templos que hay en el camino, beber un poco de agua y comer algo sobre la marcha.

La primera parte del trayecto ha sido muy energetizante, disfrutando de la vegetación exuberante mezclada con la arquitectura oriental de los templos. Luego a empezado a llover ligeramente, pero a medida que iba ascendiendo, la lluvia se ha transformado en nieve que poco a poco ha ido cambiando el paisaje de verde oscuro a blanco nuclear formando un manto reluciente digno de una postal de navidad. En esta parte del trayecto me encontraba con la mente muy serena y lúcida pendiente de todas las partes del cuerpo; los pies, las rodillas, las manos, la nariz, la espalda... para evitar que se enfriaran o notar cualquier contractura muscular. Ha sido como una meditación que me ha acompañado la mayor parte del camino.

En la segunda parte de la peregrinación, la "meditación" ha dejado paso al dolor punzante del hombro izquierdo, a la espalda contractura, a las rodillas doloridas y a un frío insoportable tanto en los pies, como en las manos. Menos mal que la dura ascensión hacia poner en movimiento todos los músculos y calentaba el cuerpo.

Lo más difícil ha sido cuando he llegado a la cima donde supuestamente (o eso ponía en la Lonely Planet) el Monasterio de la Cumbre Dorada daba alojamiento, y resulta que ya no alojaban a los peregrinos. Ha sido como si todo mi cuerpo y mi mente estuviera preparado para llegar allí y descansar. Pero al decirme que no podía alojarme allí, todo se me ha desmoronado. Mis manos se han empezado a congelar considerablemente, con lo que he tenido que calentarlas en los recipientes de Bronce donde queman el incienso de la ofrendas. Luego un alma caritativa se ha apiedado de mi y me ha dado unas galletas y una manzana, que a pesar llevar comida en mi mochila no me he visto con ganas y fuerzas de rechazarlas, con lo que han servido para aplacar el hambre que tenía a las 16 de la tarde después de todo el dia de caminata.

Viendo que no había otra alternativa, he tenido que volver sobre mis pasos y hospedarme en un hotel que había a unos 500 metros de la cima. He tardado unos 30 minutos de ducha hirviendo para que mi cuerpo dejara de temblar por el frio acumulada durante 8 horas a temperaturas que oscilarían entre los 5 y -10 C. Los dedos de las manos no entraban en calor e incluso parecían un poco morados como en un principio de congelación. Ha sido el momento más dificil de la excursión y diría que del viaje. Ahora que escribo estas líneas todavía recuerdo aquel dolor.

"Muxi, sort que no has vingut perque si no morim del fred, me mates tu".

Sobra decir, que en la cima no se veía nada más que una espesa neblina que solo permitía ver a unos 50 metros, mientras continuaba nevando sin parar. Todo estaba congelado, los arboles, los tejados de los templos, las escaleras, incluso la dorada estatua de Puxia encima de su elefante. Así que las vistas espectaculares tendrían que esperar a una ocasión más propicia.

Al día siguiente, me he levantado a las 6:00 con la esperanza de encontrar un cielo despejado iniciando de noche el camino de vuelta a la cima para llegar a ver la salida del sol. Pero las nubes han decidido que hoy no seria el día, y es que todavía estaba nevando, aunque muy débilmente. Como tampoco había suficiente luz para hacer fotos, he decidido volver a la cama del hotel que disponiba de mantas eléctricas para calentarte el cuerpo mientras duermes. Sobre las 8 he vuelto a la cima otra vez, donde esta vez se había despejado de la insistente niebla y he podido disfrutar de unas vistas un poco más lejanas, observando las nubes a los pies del monasterio, y en la cima de una acantilado se observaba el Templo de los Diez Mil Budas , al cual no se puede llegar caminando, solo con monorail.

Aunque no he visto las maravillosas vistas que se crean en tan singular lugar, seguro que recordaré este sitio toda la vida. Y por si no lo recuerdo, aquí están las escalofriantes fotos para ello.